No ha habido que esperar mucho, no, nada más y nada menos que 28 años para poder contemplar cómo el colegio público Generalísimo Franco, de Santa Cruz de Tenerife, cambia de nombre. Lo acaba de conseguir en estos días, según publica el Boletín Oficial de Canarias. A partir de ahora se llamará colegio público Tomé Cano, en recuerdo de un capitán ordinario del rey, “natural de las islas de Canaria”, como se calificaba él mismo, y “diputado de la universidad de mareantes de Sevilla”. Según explica el centro, Cano, “después de haber navegado por espacio de 54 años, compuso de orden los consejos de guerras e Indias una obra que tituló Arte para fabricar y aparejar naos de guerra y merchantes”. Aprovechamos tan extraordinaria ocasión para volver a reclamar a la autoridad competente (suponemos que militar) que retire de una puñetera vez la insultante placa que luce en la fachada del Gobierno Militar de Las Palmas con la que se conmemora el golpe de estado del muy mentado Generalísimo.