Quedamos a la espera de ver por qué derroteros piensa moverse el PP para descalificar la gestión de Mayoral, qué armas de destrucción masiva encuentra y qué medios de comunicación le hacen la seguidilla. Nosotros, que siempre fuimos críticos con los dos años negros de José Manuel Arnáiz (pocos medios de comunicación pueden decir lo mismo, ejem), les proponemos de ahora en adelante algunos ejercicios para ejercitar la memoria. El primero consiste en recordar, por ejemplo, la última hazaña del director del Puerto en esa funesta etapa, Chema Hernández, que dos horas antes de que tomara posesión de su despacho Emilio Mayoral firmó varias órdenes de pago a favor de la empresa Inerza. Uno de esos libramientos era de 400.000 euros, así que vayan calculando por qué los poderes fácticos de siempre querían el regreso de Chemita.