CCOO afirma que el alcohol sigue como la droga más problemática en el ámbito laboral
El alcohol sigue siendo, con diferencia, la droga que mayores problemas causa en el ámbito laboral, afirma el sindicato CCOO, que señala que así se desprende, tanto de los datos de las encuestas y estudios realizados en este ámbito, como de la propia experiencia del sindicato en esta materia.
Según el último estudio de la Fundación EDIS (2001), por ejemplo, el 12,3% de la población ocupada de nuestro país mantenía un patrón de consumo de alcohol catalogado como abusivo. Es decir, en una empresa de 100 trabajadores/as, en torno a 12 pueden estar teniendo problemas con el consumo de alcohol o pueden desarrollarlos en el futuro inmediato.
Esta situación se ve corroborada por la percepción de los distintos sectores del ámbito laboral, tal y como se pone de manifiesto en el estudio Percepción y actitud de las empresas españolas ante el alcohol y otras drogas (ISTAS-UCM 2006). Según este estudio, el 88% de las personas entrevistadas -directivos/as de recursos humanos, profesionales de los servicios de prevención y representantes sindicales- consideran que el alcohol es un problema muy o bastante importante en el ámbito laboral.
El problema existe, según CCOO, para la entidad, porque puede ocasionar una disminución del rendimiento, aumento del absentismo y las bajas laborales y puede comprometer la seguridad y, para los/as trabajadores/as, básicamente por los problemas de salud y los conflictos en las relaciones laborales que conlleva. No en vano, estos grupos perciben que en los últimos diez años el consumo de alcohol, por ejemplo, no ha disminuido entre los hombres y ha aumentado entre las mujeres.
La Secretaría de Salud Laboral y Medio Ambiente del sindicato advierte que esta problemática tenderá a incrementarse gravemente en los próximos años si no se revierten a tiempo las nuevas pautas de consumo juvenil asociadas al uso recreativo del alcohol.
El denominado atracón de fin de semana -consumir 5 o más bebidas alcohólicas en una sola ocasión o en un breve espacio de tiempo-, junto a la temprana edad de inicio, los cambios en el perfil de consumo hacia un modelo de policonsumo donde alcohol, tabaco y cannabis aparecen íntimamente asociados y la escasa conciencia de riesgo, constituyen un “cóctel” muy preocupante desde el punto de vista de la salud.
Datos alarmantes
Los datos disponibles a este respecto son realmente alarmantes. Según la encuesta escolar 2.004, el 81% de los estudiantes de 14 a 18 años había bebido alcohol en el último año y el 65,6%, en el último mes. Además, uno de cada tres escolares de 14 a 18 años, unos 790.000, se había emborrachado al menos una vez en los últimos 30 días, lo que supone un patrón de consumo regular. Asimismo, el porcentaje de consumo de alcohol en los 30 días previos a la entrevista se ha incrementado en casi 10 puntos en los últimos años (del 55% en 2002 al 64% en 2004) y la edad de comienzo es cada vez más temprana, situándose ya en 13,7 años.
Por otra parte, según datos del informe El alcohol en Europa, presentado recientemente ante la Comisión Europea, uno de cada 8 (13%) adolescentes de 15-16 años se ha embriagado más de 20 veces en su vida y más de 1 de cada 6 (18%) ha incurrido en lo que se denomina atracón de alcohol tres o más veces en el último mes.
Por todo ello, desde CC.OO. Canarias no se entiende la oposición tan visceral que ha despertado un anteproyecto de ley cuyo objetivo fundamental se orienta hacia la prevención de este tipo de consumo por parte de nuestros menores. Para Carmen Marrero, Secretaria Regional de Salud Laboral y Medio Ambiente de este sindicato, “esta es una realidad que está ahí y a la que no podemos cerrar los ojos y por eso no se entiende que una iniciativa de carácter preventivo, orientada a proteger la salud de los menores y adolescentes, como la de la ley del alcohol, se haya tenido que retirar por motivos puramente corporativos y electoralistas que nada tienen que ver con la propia realidad del asunto y con los auténticos intereses de la ciudadanía. Y menos aún, cuando la inmensa mayoría de las legislaciones y planes autonómicos en materia de drogas contempla el alcohol entre sus principales preocupaciones e incluso, en leyes como la valenciana, se incluyen medidas como la prohibición de la publicidad de todas las bebidas alcohólicas dirigida a menores de 18 años”.
Desde CC.OO. Canarias se insiste, por último, en la urgente necesidad de retomar los términos de este debate, sentar a todos los sectores implicados en una mesa y explicarles detenidamente la situación, para que lleguen a comprender la necesidad de adoptar este tipo de medidas de carácter preventivo, que mejoren la calidad de la información, la formación de padres, madres y educadores/as, así como las oportunidades educativas, laborales y de desarrollo de nuevas posibilidades de ocio creativo entre los adolescentes y jóvenes de nuestro país, “ya que las cuestiones de salud deben primar sobre otro tipo de consideraciones”.