Los concesionarios cerraron 2010 con una rentabilidad mínima del 0,2% de sus ingresos
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Los concesionarios de automóviles cerraron el pasado año con una rentabilidad (medida en términos de beneficio antes de impuestos sobre facturación) del 0,2%, similar a la registrada en el conjunto de 2009, según un informe de la consultora Snap-on Business Solutions para la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam).
El informe, al que tuvo acceso Europa Press, revela que en los seis primeros meses de 2010 se produjo una recuperación de la rentabilidad, que se situó en el 0,9% al cierre del primer semestre, gracias al impulso que imprimió al mercado el Plan 2000E de ayudas directas a la compra.
Este progresión del beneficio de los concesionarios, que respondió también a la optimización de los gastos por parte de las empresas, se frenó por la caída del mercado en el segundo semestre de 2010 y por los excesivos gastos estructurales que, según el estudio, están en muchas ocasiones dimensionados para un nivel de matriculaciones muy superior al registrado.
Por lo que respecta a la aportación a los resultados de cada una de las áreas de negocio, el informe pone de manifiesto una diferencia considerable entre la contribución a la cifra de negocio y al beneficio.
Así, la actividad de ventas, tanto de vehículos nuevos como usados, aportó el 74% de la facturación de los concesionarios en 2010, porcentaje casi idéntico al de 2009 (73%). Los recambios generaron el 18% de la facturación, frente al 20% en 2009, y las operaciones de taller contribuyeron con el 9% (7% en 2009).
En cambio, las actividades de posventa proporcionaron la mayor parte del beneficio a los concesionarios. El área de recambios aportó el 46% de las ganancias, frente al 41% en 2010, mientras las operaciones de taller se mantuvieron estables en un 22%, y la división de ventas bajó del 37% al 32%.
Ante esta evolución, el informe concluye que la aportación de la posventa a los resultados de los concesionarios es “vital”, y destaca que la cobertura que los recambios y el taller pueden hacer frente a los fastos de las concesiones ha sido fundamental para la supervivencia de muchas empresas de distribución.