Los consumidores ven ''execrable'' usar los ''estómagos vacíos'' como ''proyectil político''
El presidente de la Asociación de Consumidores de Gran Canaria (Acogran), José Manuel Quesada, tachó este viernes de “execrable” que “los estómagos vacíos y la miseria de muchos canarios sea utilizada de proyectil político” entre sindicatos, empresarios e instituciones, a raíz de la medida anunciada por el Gobierno canario de repartir entre las familias más desfavorecidas los alimentos que desechan los supermercados por estar próximos a caducar.
En rueda de prensa en la capital grancanaria, el también miembro del Observatorio de Distribución Comercial afirmó que el Ejecutivo regional “no se debía haber implicado” en esta iniciativa, al tiempo que insistió en que “a nadie se le está dando productos caducados” y “mientras no se distribuyan productos caducados no hay riesgo para la salud”.
En todo caso, Quesada manifestó su apoyo a la medida del Gobierno autonómico de “tutelar” la distribución de los alimentos “próximos a caducar”. Igualmente, hizo hincapié en el hecho de que “bienvenido sea un yogur caduque mañana y se pueda comer hoy” y hay que diferenciar con el término “consumo preferente”.
En los mismos términos se expresó el presidente de la Unión de Consumidores de Las Palmas (Uconpa-Cecu), Germán Hernández, que recordó que las ayudas a los más necesitados forman parte de “un sistema que venía funcionando desde hace tiempo con un Banco de Alimentos en Canarias, pero no de productos caducados”.
“Los productos caducados no sirven y ni la sanidad pública y ni ninguna asociación social pueden llevar a los sectores más desfavorecidos productos caducados”, agregó Hernández. “El Gobierno no puede estar loco para dar productos caducados, creo que hay una guerra o algo detrás”, recalcó.
Asimismo, en su opinión, “el Gobierno regional no puede presentar una medida de acción social de recoger los alimentos próximos a caducar, otra cosa es que diga que apoya a esas redes de distribución”. “Tenemos una situación de miseria tremenda y hay gente que puede comer gracias a este tipo de redes, pero que vienen no por el Gobierno sino que funcionaban ya en el Banco de Alimentos y de la colaboración de ciudadanos”, sentenció.