Chávez denuncia ser víctima de una conspiración para derrocarlo
CARACAS, 25 (Reuters/EP)
El presidente venezolano, Hugo Chávez, denunció ser víctima de una conspiración orquestada por Estados Unidos y Colombia para derrocarlo mediante operaciones militares.
Chávez aseguró haber recibido una carta de un amigo que reside en Estados Unidos en la que le alertaba de que se planean operaciones militares que incluyen un atentado contra su vida. “La fase de preparación de la comunidad internacional con la ayuda de Colombia está en plena ejecución”, señaló Chávez, leyendo la supuesta carta.
Para el mandatario las acusaciones de Colombia son mentira y un pretexto para invadir Venezuela, y dijo que la guerrilla debe reconsiderar su estrategia armada porque se han convertido en una excusa para que Washington se involucre en Colombia y agregue a países vecinos. “No voy a ceder ante el chantaje amenazas y llamo al pueblo venezolano a no ceder”, expresó.
Chávez explicó, siempre según la misiva, que el plan militar en su contra contempla “una agresión contra Venezuela, el asesinato del presidente de Venezuela o un secuestro del presidente” y la movilización de fuerzas militares a países cercanos. “Eso va unido al desplazamiento de una fuerza de contención, como ellos la llaman, hasta Costa Rica con el pretexto de la lucha al narcotráfico”.
“La verdad es que su misión es la de apoyar las operaciones militares de manera abierta porque ellos evalúan la reacción de las FARC y del ELN (...) y sacaron como conclusión que los colombianos solos no podían ejecutar la operación en corto tiempo, de manera que decidieron involucrarse directamente cuando el conflicto se dé”, añadió.
La tensión entre Venezuela y Colombia creció cuando Bogotá presentó el jueves en la Organización de Estados Americanos (OEA) presuntas pruebas de que Chávez da refugio a 1.500 rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Después de rechazar las acusaciones, el presidente venezolano rompió las relaciones diplomáticas con Colombia, poniendo en alerta al Ejército venezolano en la frontera.
Las fuerzas armadas venezolanas aseguraron esta semana estar listas para un eventual ataque de su vecino, pero Colombia descartó movilizar tropas a la frontera.
MEDIACIÓN DE UNASUR
En un intento por resolver la crisis, los cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reunirán el jueves en Quito, según anunció la cancillería ecuatoriana.
El secretario general de Unasur, el ex presidente argentino Néstor Kirchner, había acordado viajar a Caracas el 5 de agosto y posteriormente a Colombia para dialogar con Chávez y con el presidente colombiano Alvaro Uribe, que entregará el mando a su sucesor, Juan Manuel Santos, el 7 de agosto. Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prometió buscar la oportunidad de hablar con Santos para encontrar una salida al conflicto.
Chávez ha dejado la puerta abierta a recomponer los lazos con Santos, a pesar de que se espera que su Gobierno continúe con las políticas de su antecesor.
Este no es el primer choque entre Venezuela y Colombia. En el 2008, Chávez envió tanques a la frontera cuando soldados colombianos irrumpieron en un campamento guerrillero en Ecuador, lo que consideró una falta a la soberanía de Quito. Entonces, el mandatario venezolano amenazó con una guerra, pero la crisis se acabó resolviendo pacíficamente.
Desde hace un año, Chávez congeló las relaciones comerciales de Venezuela con su vecino en protesta por la ampliación de un pacto militar entre Bogotá y Washington que vio como un amenaza para su “revolución socialista”. En su primer discurso tras la ruptura de relaciones, Uribe informó el sábado que prepara medidas para asistir a miles de colombianos que basan su sustento en el comercio fronterizo y son los más afectados por la crisis diplomática.