Los liberales siguen negociando a dos bandas
Clegg y Cameron se entrevistaron de nuevo y los laboristas podrían encontrar contestación a la reforma electoral en su propio grupo
LONDRES, 11 (EUROPA PRESS/ Eva Martínez Millán)
Los partidos británicos continúan las negociaciones para intentar llegar a un acuerdo de Gobierno, cinco días después de unos comicios que dejaron una incertidumbre aún no despejada tras una nueva mañana de reuniones multilaterales en el Parlamento.
Los liberaldemócratas mantienen la indecisión acerca de qué oferta se ajusta a sus demandas y, tras entrevistarse esta mañana con una delegación laborista, han retomado los contactos con los conservadores que, en primera instancia, habían sido sus interlocutores.
A su llegada al encuentro, William Hague, uno de los portavoces del equipo 'tory', aseguró que el partido “se mantiene firmemente” en la opinión de que es preferible contar con una mayoría “segura” en el Parlamento y un primer ministro elegido y añadió que, tras expresar ayer sus propuestas para conseguirlo, hoy esperaban “escuchar la respuesta” de la tercera fuerza.
Paralelamente, los líderes han desempeñado también un papel y esta misma mañana el 'tory', David Cameron, mantuvo un encuentro con Nick Clegg, el cuarto ya, tras haberlo advertido previamente de que era “tiempo de decidir”. El dirigente liberaldemócrata reconoció tener “tanta impaciencia como el que más”, pero subrayó que la prioridad es garantizar un acuerdo de validez para garantizar un Gobierno “fuerte y estable”.
La entrevista duró una hora y se celebró en el Parlamento, donde también pasó la mañana el primer ministro, Gordon Brown, quien ha decidido mantener un papel activo, a pesar de haber anunciado su intención de abandonar la primera línea política, empezando por la renuncia al liderazgo laborista. No obstante, de momento continúa en el número 10 de Downing Street, donde permanecerá hasta que culmine el acuerdo institucional.
EVOLUCIÓN
Después de que los acontecimientos diesen un vuelco ayer con el anuncio de Brown y la demanda de “aclaraciones” de los liberaldemócratas a los 'tories', el acercamiento a los laboristas parecía decantar inesperadamente la balanza a su favor, pero una mañana de discusiones entre las dos comisiones negociadoras, de momento, tan sólo ha dejado un “buen ambiente” que no ha logrado resolver “puntos en los que hay que seguir trabajando”, según confesó uno de los participantes, el titular de Cambio Climático, Ed Miliband.
Entre estos puntos podrían figurar divergencias en materia de financiación, puesto que, según reflejó un comunicado posterior, el Laborismo vería “difícil” el acuerdo en “algunas cuestiones” dado a la “ajustada situación fiscal” derivada de un agujero presupuestario inédito en la historia reciente.
Adicionalmente, el partido de Gobierno podría ver un problema añadido en su Grupo Parlamentario, que además de echar de menos un proceso de consulta como el que ya han acometido los otros dos, vería una corriente creciente contra la reforma electoral que el partido ha garantizado a la tercera fuerza para cumplir con su demanda principal a la hora de establecer un acuerdo.
De hecho, parte ya habrían convocado una reunión y, de llevar la propuesta al Parlamento, como ya se han comprometido los negociadores, la aprobación no quedaría garantizada. Además, durante las últimas horas ha trascendido también una tendencia entre los diputados laboristas que no vería con agrado una coalición formal con los liberaldemócratas y que se ha extendido, incluso, a miembros del Gobierno. El más destacado, hasta ahora, es el ministro de Sanidad, Andy Durham, quien consideró que se deben “respetar los resultados de las elecciones”.