Obiang critica la ''injerencia extranjera'' en África
El presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, defendió ayer martes una política de “continuismo proactivo” a fin de alcanzar “las metas propuestas en el Plan de Desarrollo Horizonte 2020”, cuyo objetivo es conseguir alimentos, salud, educación, viviendas, electricidad y agua “para todos” y convertir a Guinea Ecuatorial en un “país emergente” antes de ese año. Asimismo, el mandatario aprovechó su discurso de investidura por un nuevo mandato de siete años para denunciar el “hostigamiento de algunas instituciones extranjeras” que, con el pretexto de defender la democracia y los Derechos Humanos, pretenden “injerir en la soberanía y en la independencia” de los Estados africanos.
Obiang juró ayer su cargo cuando sólo habían pasado nueve días desde las elecciones y tres días desde el anuncio oficial de los resultados, que le otorgaron la reelección con el 95,4% de los votos. La ceremonia de investidura tuvo lugar en el Palacio de Congresos y Conferencias Internacionales de Ngolo, en la ciudad de Bata (capital de la región continental), según informó este miércoles el Ministerio de Información de Guinea Ecuatorial.
En su discurso de investidura, Obiang Nguema expresó su intención de mantener un “continuismo proactivo” a fin de seguir impulsando “todos los cambios y transformaciones” que ha iniciado el país para alcanzar las metas propuestas en el llamado “Plan de Desarrollo Horizonte 2020”. “Nuestro objetivo es conseguir alimentos para todos, salud para todos, educación para todos, viviendas para todos, electricidad para todos, agua potable para todos, carreteras para todos y todo aquello que necesite el pueblo”, afirmó, citado hoy por el Ministerio. El objetivo, según Obiang, es convertir a Guinea Ecuatorial en un “país emergente” antes de 2020.
Asimismo, el presidente guineano se comprometió a “fortalecer las relaciones y la amistad con todos los países y organismos internacionales en aras de conseguir una mayor integración, paz y estabilidad mundial” y advirtió de que los Estados africanos, “sin renunciar a la cooperación con otros continentes, deben asumir el protagonismo y la solución de los problemas africanos”.
“Sin embargo, observamos con gran disgusto el hostigamiento de algunas instituciones extranjeras contra gobiernos africanos calificados constantemente como dictaduras y violadores de los Derechos Humanos cuando la buena gestión son notablemente visibles en beneficio de los pueblos afectados”, prosiguió. “Es más, desde algunas organizaciones internacionales se nos imponen políticas a los gobiernos de los Estados africanos, que con el pretexto de promover la integración mundial de las naciones, que en realidad oculta la pretensión de injerir en la soberanía y en la independencia de los estados que África debe rechazar”, aseveró.
Asistentes extranjeros
A la ceremonia asistieron diversos mandatarios africanos, entre ellos el chadiano Idriss Déby, la liberiana Ellen Johnson Sirleaf, el congoleño (de Congo-Brazzaville) Denis Sassou-Nguesso, el burundés Pierre Nkurunziza, el centroafricano François Bozize y el togolés Faure Gnassingbé. “Por problemas de agenda, no acudieron los presidentes de Gabón, Omar Bongo, ni de Sudáfrica, Jacob Zuma, pese a las excelentes relaciones que mantienen ambos países con Guinea Ecuatorial”, precisó el Ministerio de Información. Omar Bongo falleció en Barcelona el pasado mes de junio. El actual presidente de Gabón es su hijo, Alí Ben Bongo.
Aparte, durante la ceremonia estuvo presente el ministro francés de Cooperación y Francofonía, Alan Joyandet, en representación del presidente Nicolas Sarkozy. Por parte de España, según el Ministerio de Información guineano, asistieron la directora general de Política Exterior para África en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Carmen de la Peña, y el embajador en Malabo, Manuel Gómez-Acebo Rodríguez-Spiteri.