La Policía desactiva trampas explosivas del apartamento del asesino de Denver
AURORA (COLORADO), 21 (Reuters/EP)
La Policía ha realizado con éxito una detonación controlada dentro del apartamento de James Holmes, el hombre acusado de matar a 12 personas en el estreno 'El Caballero Oscuro: La Leyenda Renace' en un cine de Aurora (Colorado), por lo que parece que ya podrán entrar en la vivienda, según fuentes policiales.
El jefe de la Policía, Dan Oates, ha explicado que unas fotos tomadas a través de una ventana del tercer piso muestran frascos de municiones y “cosas que parecen proyectiles de mortero”. Además en el apartamento se han encontrado botellas de plástico que contienen un líquido desconocido y cables que recorren toda la casa.
Una portavoz de la Policía, la sargento Cassidee Carlson, ha afirmado que el dispositivo había sido claramente “creado para matar”. “Hemos tenido éxito en la desactivación de un segundo dispositivo,” ha añadido. “Aunque no es seguro, tenemos la esperanza de haber eliminado las restantes amenazas. No lo sabremos hasta que entremos en el apartamento”, ha explicado.
“Todavía quedan todo tipo de peligros dentro de la vivienda”, ha puntualizado Carlson. “Vamos a permanecer aquí durante horas para reunir pruebas y mitigar esos riesgos”, ha indicado.
La Policía ha evacuado cinco edificios cercanos y ha establecido un perímetro de varias manzanas alrededor del apartamento de Holmes, situado en la última planta de un edificio en un barrio de clase baja de Aurora, por miedo a una posible explosión.
De acuerdo con la explicación de Oates, la Policía llegó al cine donde tuvo lugar la masacre 90 segundos después de que se realizará la primera llamada de emergencia y Holmes fue detenido sin luchar en un aparcamiento situado detrás de la sala. Según han explicado las autoridades, el joven llevaba el pelo teñido de rojo y se hacía llamar 'Joker', en referencia al enemigo de Batman. El lunes se presentará por primera vez ante el juez.
Holmes estaba armado con un fusil de asalto AR-15, una escopeta de 12 cartuchos y una pistola Glock de calibre 40, ha indicado Oates. Además, la Policía encontró otra pistola Glock en su coche aparcado junto a la salida de emergencia del cine.
El detenido compró las armas legalmente en tres tiendas de la zona durante los últimos 60 días y adquirió 6.000 cartuchos de munición, ha señalado Oates. La Policía no ha determinado aún si el fusil era semi-automática o no. Sin embargo, el tirador podría fácilmente haber realizado entre 50 y 60 disparos en un minuto, ha añadido.
LAS VÍCTIMAS
De acuerdo con la información facilitada por los hospitales en los que fueron ingresados los 50 heridos de la masacre, algunos de los pacientes tienen graves lesiones en la cabeza y en el pecho.
El Hospital de la Universidad de Colorado, en el que ha tratado a 23 de las víctimas, ha informado de que diez de los heridos ya han recibido el alta, mientras que cinco continúan en estado crítico. El Centro Médico de Aurora ha indicado que de los siete pacientes que atiende, de entre 16 y 31 años, cuatro permanecen en la unidad de cuidados intensivos y los otros tres en la unidad de traumatismos.
“La carga inicial de adrenalina de que algo como esto suceda, tanto para las familias como para los propios pacientes, está empezando a desaparecer”, ha explicado el doctor Bob Snyder, un cirujano de traumatología del Centro Médico de Aurora.
La gente está acudiendo al centro comercial donde se encuentran los cines para dejar flores, velas, peluches y pancartas en señal de respeto y duelo por las víctimas.
Los testigos del tiroteo, por el cual también tuvo que ser trasladado al hospital un bebé, han descrito lo sucedido. “Me quité un poco de sangre y cayó sobre una señora. La sacudí y dije: 'Tenemos que irnos, levántese', y no respondió así que supuse que estaba muerta”, relata Tanner Coon, de 17 años.
“Fue un caos tremendo”, ha dicho Jennifer Seeger, de 25 años. “Todo el mundo empezaba a gritar y correr. Él fue directamente desde aquí hasta aquí con un arma en mi cara en ese momento. Ese rifle estaba en mi cara y yo honestamente no sabía qué pensar”, ha explicado.
Un funcionario policial que ha pedido permanecer en el anonimato ha dicho que el sospechoso compró una entrada, entró en el cine y salió por la puerta de emergencia que estaba entreabierta para volver a entrar por ese lugar ya armado.