Sonia Sotomayor, nueva magistrada del Supremo de EEUU
La juez Sonia Sotomayor se ha convertido este jueves en la primera persona de origen hispano en llegar a lo más alto de la magistratura de Estados Unidos después de que el Senado confirmara su designación como nueva integrante de la Corte Suprema de Justicia.
Nacida en el distrito neoyorquino de Bronx y de padres puertorriqueños, Sotomayor también se convierte a sus 55 años en la tercera mujer que accederá al Supremo tras una votación cuyo resultado, histórico aunque esperado, ha sido de 68 votos a favor y 31 en contra.
Su candidatura para un puesto que en Estados Unidos es vitalicio había sido anunciada hace varios meses por el presidente, Barack Obama, y a mediados de julio pasado tuvo que someterse durante cuatro días al riguroso examen de los senadores del Comité de Asuntos Judiciales de la Cámara Alta.
El resultado de la votación ha sido anunciado por el senador Al Franken, un conocido humorista estadounidense que hace varias semanas se convirtió en el último miembro en acceder a la Cámara alta tras un polémico recuento de votos en Minnesota.
La historia empezó a hacerse el pasado 28 de julio, cuando el comité de Asuntos Judiciales del Senado aprobó la designación de Sotomayor por trece votos a favor y seis en contra, votación en la que un senador republicano votó a favor de la juez de Nueva York.
Jura su cargo el sábado
Será este sábado a partir de las 11.00 horas y ante el juez John G. Roberts Jr, actual presidente de la Corte Suprema de Justicia, cuando Sonia Sotomayor vea cumplido su sueño y jure su cargo como la 111 integrante del alto tribunal.
Su designación a pesar de la campaña de acoso de los sectores más reaccionarios republicanos representa el colofón a una intensa carrera judicial que comenzó hace 17 años y que le ha permitido pasar por todos los niveles de la magistratura.
Sotomayor ha contado con el voto favorable de todos los senadores demócratas y también de nueve republicanos, que ya habían anunciado que apoyarían su candidatura a diferencia de la mayoría de sus compañeros de partido.
Las críticas a la magistrada se centraron fundamentalmente en unas polémicas declaraciones que hizo hace varios años en las que aseguró que una mujer latina inteligente puede tomar mejores decisiones que un hombre blanco. La juez defendió el mes pasado hasta el cansancio su neutralidad, reiteró que en toda su carrera no ha dejado que sus experiencias personales ni sus opiniones influyeran en sus sentencias, aunque terminó aceptando que sus palabras no fueron afortunadas porque podían ser malinterpretadas.