Tanques israelíes penetran unos 500 metros en el norte de Gaza
El Ejército israelí informó de que tiene conocimiento del movimiento de tanques esta mañana escasos metros desde la zona fronteriza hacia el interior de la franja palestina, pero no confirmó las últimas informaciones. A lo largo de la jornada la aviación israelí llevó a cabo cuatro ataques contra distintos blancos en la ciudad de Gaza y el sur de la franja mediterránea con el resultado de siete palestinos muertos, entre ellos al menos dos miembros del brazo armado de Hamás, según distintas fuentes.
Por su parte, el presidente palestino, Mahmud Abás, pospuso su prevista visita para este jueves a Gaza, donde iba a reunirse con el primer ministro, Ismail Haniye, por “razones de seguridad”, informó su portavoz, Mohamed Edwán. El portavoz añadió que el desplazamiento del presidente palestino a la franja territorial será “posiblemente mañana” y, tras su encuentro con Haniye, Abás se propone declarar el “estado de emergencia”.
“No es seguro para él ir hoy (jueves)” a Gaza, precisó Edwán en referencia a los enfrentamientos entre el movimiento nacionalista Al Fatah y el islamista de Hamás, que han causado 43 muertos desde el pasado domingo.
Nuevos ataques aéreos
Además, al menos quince palestinos resultaron heridos en un nuevo ataque aéreo israelí registrado durante la tarde de este jueves en el centro de la ciudad de Gaza, que tuvo como blanco un cuartel general de la denominada Fuerza Ejecutiva, leal al grupo islámico Hamás, informaron testigos y fuentes militares israelíes.
El edificio de tres plantas que albergaba una de las sedes de esa fuerza creada por el anterior ministro del Interior palestino Said Siam hace un año quedó completamente destruida, relataron los testigos. Una portavoz del Ejército israelí confirmó que se trató de “un ataque de la Fuerza Aérea contra un cuartel general de Hamás”.
Islam Shahwan, portavoz de la Fuerza Ejecutiva, confirmó que no se había producido ninguna víctima mortal en el ataque. Con todo, Shahwan precisó que “cuatro de los heridos son miembros de la Fuerza Ejecutiva, y el resto civiles y viandantes”.
Asimismo, fuentes oficiales palestinas dijeron que además del ataque contra el inmueble perteneciente a Hamás, el Ejército israelí efectuó otro ataque contra un comando de la Yihad Islámica en el norte de la franja de Gaza, aunque los miembros de la célula habrían logrado salir ilesos de la ofensiva. El Ejército israelí negó que su fuerza aérea haya cometido un ataque contra el norte de la franja de Gaza.
En el plano interno, después de concertar durante la noche del miércoles un cuarto alto el fuego desde el pasado domingo y de una madrugada sin incidentes, fuentes islamistas informaron antes del mediodía de la muerte de uno de sus milicianos, desaparecido hace dos días en el campo de refugiados de El Bureij, y de un guardián de la Universidad Islámica, un bastión de Hamás, herido por un francotirador de Al Fatah. Al Fatah acusó a los islamistas del secuestro de cinco miembros de la Seguridad Preventiva. Los partidarios de Hamás mataron ayer a seis guardaespaldas del jefe de ese organismo secreto, Rashid abú Schbak, en un ataque contra su residencia.
Asimismo, fuentes del movimiento nacionalista informaron de que milicianos de Hamás, vestidos con el uniforme de Al Fatah, están deteniendo vehículos en la ciudad de Gaza y exigen documentos de identidad a conductores y pasajeros para observar en un ordenador portátil si son “personas buscadas” por los islamistas. En la sangrienta jornada de la víspera en Gaza murieron al menos veinte palestinos, en su mayoría milicianos de Al Fatah, según fuentes de la seguridad, en tanto crece la impresión de que los disciplinados combatientes de Hamás superan a sus rivales.
Un dibujante de la prensa palestina, que informa con titulares de “desastre” de los sangrientos choques, representa al futuro Estado palestino como un barco que se hunde, en el diario Al Quds, y otro a palestinos que combaten y riegan con su sangre un cactus del que asoma una bandera israelí, en el diario Al Hayat. Hamás dio a conocer un documento en el que informa de doce violaciones de la tregua concertada anoche entre Abás y Haniye, y acusa de ello a milicianos de Al Fatah y fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) del presidente Abás.
Temor a una invasión
Por otra parte, la persistencia de los ataques palestinos contra el sur de Israel, especialmente la ciudad de Sderot, también genera en la calle palestina el temor a una nueva invasión militar israelí o castigos como la reducción del suministro de electricidad y agua que compañías del vecino país venden a la franja de Gaza.
El ministro israelí sin cartera, Isaac Cohen, reveló a la radio pública que esos castigos forman parte de un programa de posibles reacciones que el Gabinete de Seguridad estudiará el próximo domingo en Jerusalén. El Ejército israelí “adelantó” por la mañana cuatro tanques y dos excavadoras en la zona de Abu Safye para establecer una atalaya, una “operación de rutina”, según fuentes militares.
A pesar de la tensión entre sí, los milicianos de Hamás, de Al Fatah y de la Yihad Islámica asumieron este jueves la responsabilidad de los 13 cohetes Al Kasam que dispararon desde Gaza, la mayoría de ellos en dirección a Sderot. Uno de esos imprecisos proyectiles, impactó hoy en Shaar HaNeguev e hirió a dos civiles.
En Sderot 200 habitantes fueron evacuados este jueves a otros puntos del país pues sus edificios carecen de la debida protección.
