El Rey destaca en Melilla la ''sincera amistad'' de España con sus vecinos
El Rey, en su primera visita a Melilla en 32 años de reinado, resaltó las relaciones “de sincera amistad” que cultiva España con sus vecinos, a los que el presidente de la ciudad autónoma, Juan José Imbroda, pidió “respeto” y enterrar “viejos tópicos”.
Sin mencionar expresamente a Marruecos, país que se ha mostrado en contra de esta visita real a Ceuta y Melilla al considerar que son “ciudades ocupadas”, Don Juan Carlos insistió este martes en el carácter abierto y solidario de España que “desde el respeto mutuo cultiva relaciones de sincera amistad con sus vecinos”. Tampoco Imbroda citó a Marruecos pero sí ha apuntado que, a veces, “nos duelen especialmente las incomprensiones o las sinrazones interesadas que nos llegan de las orillas amigas”.
Estas palabras fueron pronunciadas por el Rey después de recibir la Llave de Oro de Melilla en un emotivo acto celebrado en el Palacio de la Asamblea en presencia de la Reina, la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, y del gobierno autónomo en pleno. Unos treinta mil de los más de setenta mil habitantes de Melilla llenaron este martes las calles de la ciudad, que se vistió con los colores de la bandera nacional, para recibir a Don Juan Carlos y a Doña Sofía en una visita real que no se producía desde que en 1927 Alfonso XIII viajara a esta plaza del norte de África.
Con la visita a Ceuta el lunes y a Melilla este martes se completa el recorrido de los Reyes por el mapa de España en 32 años de reinado.
Un senador detenido en las protestas marroquíes
Ciudadanos de las distintas religiones que conviven en Melilla -cristianos, musulmanes, judíos e hindúes- se unieron en una sola voz para afirmar que “Melilla es española” y aplaudieron la presencia de los Reyes.
En contra, varios cientos de personas se manifestaron en la frontera marroquí con Melilla con gritos a favor de que las ciudades autónomas españolas y el Sáhara sean marroquíes y coreando: “No queremos fronteras, queremos la tierra de nuestros abuelos”. En la misma manifestación, un senador marroquí de origen melillense, Yahya Yahya (en la última imagen), intentó provocar a las Fuerzas de Seguridad españolas que vigilaban el desarrollo de una protesta, momento en el que se ha aprovechado para entregarle una citación judicial por malos tratos.
Además, la coordinadora de los manifestantes hizo un llamamiento al boicot contra los productos españoles en Marruecos. Los convocantes divulgaron un comunicado al final de la protesta en el que se pidió a las autoridades marroquíes “revisar su política con España, país que no respeta los intereses comunes”.
La visita a Melilla “no podía dejarla más tiempo”, dijo Don Juan Carlos, quien expresó a la ciudad todo su “afecto y apoyo”. Según el Monarca, “como Rey que se debe a todos los españoles, tenía contraído el compromiso de visitar Melilla junto con la Reina. Un compromiso al que se unía un profundo deseo”.
Don Juan Carlos, que ya estuvo en Melilla en 1970 cuando era príncipe, subrayó “la inconfundible personalidad histórica y la riqueza cultural de esta ciudad, que se ha sabido enriquecer con un armónico espíritu de integración y convivencia”. El Monarca aseguró: “He seguido con especial interés los anhelos, dificultades y esperanzas de los melillenses” cuyos “sentimientos de lealtad y afecto a la Corona” fueron transmitidos.
“Desterrar tabúes”
El presidente de Melilla, por su parte, ha considerado que esta visita histórica servirá para “desterrar tabúes e ignorancia”.
“España, aquí, se siente de una manera especial, por eso nos duele y rechazamos aquellos comportamientos que intentan manchar a nuestra nación y a su máximo representante, el Rey”, añadió Imbroda. Tras expresar “la inquebrantable voluntad de permanencia” de Melilla “en nuestra nación”, el presidente de la ciudad manifestado que le deben al Monarca “todos estos años de libertad y prosperidad”.
Los Reyes tuvieron la oportunidad de saludar y conversar con los representantes de los distintos estamentos sociales de Melilla en un almuerzo celebrado en un hotel de la ciudad para cuatrocientos invitados a los que saludaron personalmente. Tras casi cinco horas de visita oficial, Don Juan Carlos y Doña Sofía se despidieron de los comensales y de los ciudadanos de Melilla para regresar a Madrid.
Reacciones políticas
Las reacciones a esta visita real a Ceuta y Melilla continuaron este martes.
Mientras el presidente del PP, Mariano Rajoy, recordó a Marruecos que Ceuta y Melilla son territorio español y que es coincidencia que se haya producido la visita real en el aniversario de la Marcha Verde, el portavoz de IU-ICV, Joan Herrera, lamentó que las relaciones hispano-marroquíes se hayan deteriorado por este viaje oficial. Sin embargo, el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, pidió respeto a las “posiciones divergentes” de Marruecos, tras tener que escuchar de nuevo las quejas de su homólogo marroquí.