La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal

Cacerolada para amenizar el pleno en Santa Cruz

Una sonora cacerolada dio la bienvenida este sábado a José Manuel Bermúdez a su entrada en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, del que fue nombrado alcalde, a eso de las once y media de la mañana, por un pacto rematado 24 horas antes entre CC y PSC. Una cacerolada que también “saludó” a los nuevos concejales de la corporación al coro de la canción payasa de Fofó Había una vez un circo.

El protocolario y solemne acto que se vivió en el salón de plenos de la Casa de los Dragos, lleno hasta las escaleras de entrada, con himno nacional e himno de Canarias a cargo de la Banda Municipal de Santa Cruz, contrastaba con lo que ocurría en la calle, más de mil personas al inicio de la mañana, que a los gritos de “no, y que no, que no nos representan”, “chorizos”, o el consabido, “ustedes, fascistas, son los terroristas”, llegó a movilizar a una veintena de agentes de la Unidad de Intervención Policial, además de seis dotaciones de la Policía Local.

Tanto era el miedo a ese millar de personas, que no sólo coparon el frente de entrada al Ayuntamiento, sino también sus salidas traseras, que todo el edificio quedó “blindado” por barreras amarillas y policías. No hubo ningún incidente.

Lo que sí hubo fue una brecha entre los 15-M, mayoritarios, y los integrantes de la Plataforma contra el PGO, tanto que estos últimos apenas participaron y quienes lo hicieron se fueron marchando, quizás al tener conocimiento que el Plan que les afecta puede que no sea aprobado con parches, sino que habrá que rehacerlo de nuevo.

“Yo estoy contra el PGO, pero no tengo nada ver con los del 15-M y sí, estoy en contra de que estén aquí”, declaró a este periódico un jubilado con su casa devaluada por haber quedado fuera de ordenación“. ”Yo soy una española indignada“, clamaba Elena de 66 años. ”Soy una indignada, una cabreada, se han ido unos chorizos y nos han dejado otros“.

Todos de acuerdo

De un movimiento o de otro, los concentrados no pararon en las cerca de cinco horas que se llevó la toma de juramento o promesa de los concejales, la entrega del bastón del mando a Bermúdez y los siete discursos que se pronunciaron, todos de acuerdo en que el dinero que supuso la compraventa del frente de la Playa de las Teresitas, más de 52 millones de euros, deben volver a las arcas municipales, aunque en su interminable alocución, Julio Pérez, ya primer teniente de alcalde, sólo se refirió al cumplimento “de las decisiones judiciales firmes”.

También hubo en los discursos unanimidad en que hay que reducir el personal eventual y los cargos de confianza, algunos de los cuales han logrado plaza fija en los últimos meses por cumplir cometidos que no les correspondían, como la persona de confianza que ha protagonizado el Caso Lerena, que desveló este periódico.

Y más coincidencias en el gran punto del fuerte de esta nueva corporación: el Plan General de Urbanismo de la ciudad, del que la portavoz de CC-PNC-CCN dijo que es “mejorable”.

Nuevos con viejos

Cristina Tavío, del PP, saludó a Bermúdez con “un enhorabuena por lograr la mayoría que las urnas le negaron, con un pacto diseñado en otra isla e impuesto por Madrid” y se felicitó a sí misma por haber sido la más votada y la primera mujer que debería haber sido alcaldesa de Santa Cruz de Santiago de Tenerife“.

Los manifestantes en la calle no vieron cómo Ángela Mena, que hasta hace una semana era responsable de Vivienda, Participación Ciudadana y todo cuanto concierne al área de Mujer, juraba sin pestañear “cumplir y hacer cumplir la Constitución y las normas fundamentales”, pese a estar imputada por la Fiscalía de la Audiencia Provincial en contrataciones más que dudosas a tres empresas amigas y en el acoso laboral a una funcionaria de carrera a la que no considera afín.

La imagen de los nuevos componentes de la Corporación no dejó de resultar chocante. Quienes antes estaban sentados a la derecha, ahora lo están a la izquierda. Los socialistas han sido movidos de banco, y los “extraños”, los verdaderamente nuevos, como los concejales de Alternativa Sí Se Puede y de Socialistas por Tenerife, ocupaban la misma fila que Guillermo Guigou (Ciudadanos por Santa Cruz y tercer mandato), con quien no intercambiaron palabra.

Etiquetas
stats