Cuatro carreteras permanecen cerradas en Gran Canaria
El Cabildo de Gran Canaria ha insistido este miércoles en que se debe extremar la conducción en las carreteras de la isla ante el peligro de desprendimientos por la lluvia, han informado fuentes del gabinete de prensa, que han indicado que continúan cerradas al tráfico cuatro vías.
Las carreteras que siguen cerradas son la GC-605, que une Ayacata con la Cueva de las Niñas; la GC-606, de acceso a Carrizal de Tejeda; la GC-210, entre la cruz de Acusa y el Parralillo; así como la GC-60, que va desde Tejeda a San Bartolomé de Tirajana, según las fuentes.
Además, han señalado que se están produciendo cierres intermitentes en la carretera GC-550, que une Temisas con Agüimes para efectuar labores de limpieza de la calzada.
La carretera que une La Aldea con Agaete está abierta, si bien el alcalde, Tomás Pérez, ha insistido también en que se extreme la precaución en la conducción tras el derrumbe de este martes a la altura del Andén Verde, donde cayeron sobre la vía cinco toneladas de tierra y estuvo a punto de perder la vida una conductora que transitaba por la zona.
El alcalde ha explicado que por ese punto sólo puede circular de momento un vehículo y ha indicado que se trata de una zona donde los desprendimientos se repiten pese a la malla de sujeción instalada.
Pérez se ha referido al peligro que corren las personas que circulan por esta vía diariamente, que siempre existe pero que con las lluvias caídas es mucho mayor, ya que no pueden evitar su paso porque es la única a carretera que comunica el municipio con la zona norte de la isla y la capital.
Ha señalado que se trabaja en la limpieza de la vía y que hay operarios en la zona por si se producen nuevos desprendimientos, y ha subrayado que hasta ahora ha habido mucha suerte, porque, pese a que los aludes son frecuentes y la posibilidad de caída de taludes también, no se han producido daños personales.
El alcalde ha reiterado que urge la construcción de la nueva vía que unirá Agaete con La Aldea y ha pedido de nuevo que se acorten los plazos de ejecución de la carretera, que está previsto que se construya en 40 meses una vez que se adjudique la obra, según ha recordado.
Así mismo, ha dicho que la comunicación terrestre del municipio tanto por el norte como por el sur entraña peligro, pues los desprendimientos se producen en ambas vías.
La salida de los camiones con frutas y tomates, así como los suministros para el comercio y los avituallamientos que precisa el municipio se hacen todos por la carretera de Agaete, ha recordado el alcalde, quien ha insistido en que son muchas las personas que deben circular por esa vía a diario arriesgando sus vidas.
