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''¿A mí qué me cuentan de las querellas de Soria?''

“Ningún miembro de mi Gobierno ha presentado querellas contra ningún profesional de la comunicación”. Escuchar esta frase de boca del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, pronunciada con tono solemne en el Parlamento regional, dejó con la boca abierta a más de un periodista presente en la sesión plenaria de este miércoles, cuando hace apenas una semana que el magistrado del juzgado de lo Penal 4 de Las Palmas de Gran Canaria ha fallado en contra de José Manuel Soria y ha echado por tierra su cruzada personal por cuestiones de imagen y honor contra Carlos Sosa y Francisco J. Chavanel.

El socialista Manuel Marcos Pérez abrió el pleno con la pregunta a Rivero de si compartía esa tendencia que tienen los miembros de su Gobierno de querellarse con los profesionales de la comunicación para amedrentarles, pero Rivero, con toda la atención concentrada en el caso Tebeto, negó lo innegable porque se guardaba un truco: que Soria se peleó con Sosa y Chavanel en 2006, pero él entonces no era presidente.

Marcos Pérez le recordó la sentencia del magistrado García García-Sotoca y la contundencia con la que plasma el intento por parte de Soria de intentar amordazar a los dos periodistas para impedir el libre ejercicio de su profesión.

“Usted también suele querellarse con el mismo fin: que no haya libre expresión por miedo a que le caiga a uno una querella”, dijo el socialista. “No es bueno para el Gobierno de Canarias. Ustedes censuran a diario, bien insultando y siempre como represalia. Usted que defendió tan bien el Estado de Derecho cuando fue presidente de la Comisión del 11-M, ¿qué le ha pasado?”

Pues lo que ha pasado es que “la querella es del año 2006 y no tiene nada que ver con mi Gobierno”, puntualizó Rivero, quien no se refirió en ningún momento a la importancia de la libertad de prensa y de información como pilares de la democracia. Antes bien, consideró que el derecho al honor y a la propia imagen “es un derecho fundamental para todos los ciudadanos y las acciones que en su defensa hagan los ciudadanos nada tienen que ver con la acción política del Gobierno”.

Mejor dejar a Soria como ciudadano después del varapalo que el juez le ha dado a su imagen y a su honor, tras condenarle a costas por su demostrada mala fe. Y es que en el Pleno de este miércoles había otra imagen que acaparó la atención de los fotógrafos y de los socialistas: la llegada al hemiciclo de la ex alcaldesa de Puerto de la Cruz, la diputada por el PSC Lola Padrón que con aplomo, pero visiblemente cansada, ocupó su asiento mientras recibía muestras de apoyo de sus compañeros de filas.

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