Los vendedores conejeros se sienten excluidos
La Plataforma de Vendedores Ambulantes de Lanzarote ha mostrado su protesta por haber quedado excluida de las negociaciones entre la Federación Canaria de Municipios (Fecam) y el Gobierno de Canarias para la regulación del sector, que se debe adaptar a la Directiva europea Bolkestein.
Los vendedores de mercadillos de la Isla señalan que a la reunión que está prevista este martes no se ha invitado a los profesionales y tan sólo se ha convocado a los vendedores de Gran Canaria para explicarles el contenido de la reunión. Los vendedores destacan que la regulación será para todo el Archipiélago y no sólo para la isla de Gran Canaria.
Señalan que el Gobierno de Canarias va a dejar en manos de los ayuntamientos la potestad para renovar las licencias y que eso les provoca una gran incertidumbre para hacer su trabajo ya que venden en varios municipios, que tendrían normativas distintas.
Los vendedores piden que se haga una normativa para todas las islas similar a la de la Comunidad de Madrid. Proponen que las licencias se concedan por quince años, que sólo se conceda una a personas físicas y que no se puedan vender o alquilar para evitar la entrada de empresas en el sector de los mercadillos.
La portavoz de la Plataforma, Dolores Torres, señala que la situación en el sector es mala y que “con la pérdida de un solo mercadillo ya no nos podríamos dedicar a esto porque no sería suficiente para mantener una familia”. La Plataforma se reúne este martes con el consejero de industria del Cabildo de Lanzarote y los siete ayuntamientos para trasladarles su preocupación e intentar que se sumen a sus reivindicaciones.
