Detenidos tras robar en 23 viviendas en Tenerife
La Guardia Civil ha detenido en Tenerife a cuatro personas como presunto autores de 23 delitos de robo, dos delitos de receptación, uno de tenencia ilícita de armas y municiones y un último delito contra la salud pública.
Una nota de la Guardia Civil indica que el caso también está imputada una quinta persona y precisa que los detenidos forman parte de un grupo organizado criminal y tienen edades comprendidas entre los 26 y 36 años.
La investigación comenzó en el segundo semestre del año 2012 cuando se detectó un aumento significativo en la comisión de robos con fuerza en interior de domicilios en zonas residenciales de las localidades de Candelaria, Arafo y en menor incidencia en el municipio de Güímar.
La mayoría de los robos tuvieron lugar en ausencia de los moradores y se sustraían objetos y efectos de fácil salida y venta en el mercado negro, con preferencia de joyas, relojes, teléfonos móviles, ordenadores portátiles, cámaras fotográficas, televisores tipo plasma, herramientas variadas y dinero en efectivo.
La Guardia Civil informa de que en inspecciones oculares se detectó que la forma de operar era similar en la mayoría de los hechos delictivos y los delincuentes dejaban escasos indicios que pudieran facilitar el esclarecimiento del robo.
Las investigaciones se han prologado desde el mes de agosto de 2012 hasta julio de 2013 debido, según la Guardia Civil, a la laboriosidad y a la dificultad en la obtención de pruebas incriminatorias en contra de los presuntos autores.
Durante el transcurso de la investigación se constató que los implicados liberaban en pocos días, la mayoría de los efectos sustraídos y los cambiaban por dinero en efectivo y drogas, lo que dificultaba la labor policial ya que se perdía el rastro de los objetos que podrían vincular por identificación con los propietarios.
Según la Guardia Civil, el grupo estaba dirigido por un conocido delincuente residente en la localidad de Candelaria siendo el responsable en la planificación, ejecución y reparto del botín.
En los registros domiciliarios llevados a cabo en Santa Cruz de Tenerife y Candelaria, se intervinieron una cantidad importante de efectos de procedencia ilícita, entre los que se encontraban teléfonos móviles, piezas de joyería en su mayoría de oro, relojes o cámaras fotográficas.
Además en una vivienda de Candelaria se localizaron diversas cantidades de sustancias estupefacientes.
Una parte significativa de los efectos aprehendidos durante los registros y en poder de los presuntos implicados, fueron reconocidos por sus legítimos propietarios, lo que, según la Guardia Civil, refuerza las pruebas incriminatorias ya obtenidas.