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Opinión - ¡Con los jueces hemos topado! Por Esther Palomera

Intentó degollar a su mujer porque estaba transtornado

La defensa de J.M.L.D., para quien el fiscal pide 14 años por intentar degollar con un cuchillo de cocina y estrangular con las manos a su mujer mientras dormía, pidió este miércoles su libre absolución al alegar que “no era responsable de lo que hacía”.

Así lo afirmó uno de los abogados defensores, Pedro Hidalgo, al término de la vista fijada en la sección segunda de la Audiencia de Las Palmas, cuya celebración se pospuso para el próximo 27 de abril a las 09.30 horas porque no se citó debidamente a un testigo propuesto por la Fiscalía, según dijo el letrado a los periodistas.

Se trata de un médico que trató al acusado, quien por entonces recibía un tratamiento para el Parkinson, explicó el abogado de la defensa, que pide la absolución para el acusado ya que cuando sucedieron los hechos, el 13 de julio de 2009 en San Bartolomé de Tirajana, se encontraba bajo los efectos de unas medicinas “que le hicieron daño” y que le dejaban en una situación de “incapacidad mental”.

Sin embargo, en su escrito de calificaciones provisionales la Fiscalía pide que J.M.L.D. sea condenado por un delito de asesinato en grado de tentativa y que, además de la pena de prisión, se le prohíba acercarse a menos de 500 metros de la víctima, a su domicilio o lugar de trabajo.

La Fiscalía considera que el procesado, en prisión desde el 16 de julio de 2009, sobre las 06.30 horas del 13 de julio de ese año, cuando su mujer dormía en el domicilio familiar y “con la finalidad de acabar con su vida” cogió un cuchillo de cocina con el que comenzó a cortarle el cuello mientras se lo sujetaba con la otra mano.

Como no lo conseguía porque se le partió el cuchillo, “lo soltó y con las dos manos trató de estrangularla quedando ella aturdida, ante lo cual el acusado pensó que la había matado, dejándola en la cama, momento en el que” la víctima “aprovechó para huir”.

La agresión costó a la mujer dos heridas inciso contusas en el cuello y dos en una oreja y una mano que requirieron tratamiento quirúrgico y de las que curó en catorce días, si bien le han quedado secuelas en el cuello que le producen un perjuicio estético ligero, agrega el escrito del fiscal.

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