Prisión para el dueño de la perra que declaró como testigo en su propio juicio por maltrato animal
El Juzgado de lo Penal número 1 de Santa Cruz de Tenerife ha condenado a un año de cárcel al hombre que tiró a su perra a la basura en Tenerife cuando se encontraba gravemente herida tras ser atacada por otros perros de su propiedad en 2012. El fallo lo considera culpable de un delito de maltrato animal. La jueza que llevó ese casó citó como testigo a la perra maltratada, de nombre Milagros.
La sentencia, hecha pública este lunes, recoge, por expresa petición de la Fiscalía, que la condena no sea suspendida, de tal forma que el hombre deberá cumplir la pena de prisión en su totalidad, al tiempo que se le impide tener animales domésticos durante tres años.
Además, también ha sido condenado a un año de inhabilitación para ejercer sufragio pasivo, se le impide ejercer cualquier profesión u oficio relacionado con animales y deberá indemnizar al albergue de Valle Colino, a través de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (FECAPAP), con los gastos dispensados a la perra desde que llegó al complejo hasta su total recuperación física y mental.
Contra la sentencia, que no es firme, cabe interponer recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.