Cruce de cables en La Caja

Que no hay manera, oiga. Miren que a La Caja le han advertido, por activa y por pasiva, que corte los cables a aquel que utilice sus soportes informáticos para insultar y calumniar. Le avisaron UGT y CCOO a cuenta de las circulares cuadriculadas del CSICA. Le instaron desde la Inspección de Trabajo a desconectar la bomba de relojería que un día decidieron activar a través del sindicalismo... constructivo. La cosa va ya por Granadera Canaria. Y que no hay manera: La Caja, a través de su redactor informático, mete ahora los deditos en enchufes bien cargaditos de energía. Eso pasa por contar con quien no sabe que el cable rojo va con el cable ídem y el azul, ¿con cuál conecta el azul, mi niño? Les explicamos: resulta que el querellado del CSICA que se enteró el último del puro que le pretende meter el presidente del Comité de Empresa va, tan pancho, y propaga a través de la Intranet de la entidad la mauriciada de Canarias7. Ya saben nuestros lectores, y también La Caja, claro, que desde el lunes este periódico anunció querella contra el consejero que tan cerquita les toca. Pues nada: entendemos que el CSICA y su Circular 52 del martes, con el consentimiento técnico de su dirección general, estaba advertida con suficiente antelación. “No hay peor ciego que el que no quiere ver”, reza el titular del 52. Va a tener razón...