Ashli Babbitt, la seguidora de Trump que fue abatida durante el asalto al Capitolio de los Estados Unidos, era una californiana veterana de la Fuerza Aérea, a la que había dedicado 14 años de servicio, que tan solo unos días antes había tuiteado cosas como “la tormenta ya está aquí” o “nada nos detendrá”.
Babbitt fue alcanzada por una bala en el pecho mientras se encontraba en el interior del Capitolio participando en las revueltas que han protagonizado los seguidores de Trump para evitar la certificación de Joe Biden como presidente por parte del Congreso.
A pesar de que las autoridades aún no han confirmado su identidad, ha sido la propia familia de Babbit la que ha notificado al New York Post que se trataba de ella. Su suegra se ha mostrado “devastada” y en una entrevista al mismo medio ha declarado que tanto ella como su hijo se han enterado por la televisión.
La cuenta de Twitter de Babbit está plagada de mensajes de apoyo a Trump y anuncios de la marcha de Washington del pasado miércoles. Además, se presentaba como una “excombatiente” y “libertaria”.