Las autoridades ucranianas en la ciudad de Sumy han controlado una fuga de amoniaco que se produjo esta madrugada desde una fábrica bombardeada por los rusos, según ha informado el gobernador regional, que confirmó que ya no hay peligro para la población.
El gobernador de Sumy, Dmitro Zhuvytskyy, ha informado en su canal de Telegram que sobre las 07.50 hora local (05.50 GMT) se controló la fuga y que tan solo una persona ha resultado herida. “Los equipos de emergencia están trabajando para disolver la nube de amoníaco. No hay amenaza para la población”, ha dicho el gobernador en Telegram.
El área que se ha visto afectada es de un radio de 5 kilómetros. En un primer momento, las autoridades locales pensaron que el escape podría afectar a la población del perímetro, a la que se le advirtió de que dejara la zona o en caso contrario se resguardara en refugios, sótanos o pisos inferiores.
El amoniaco es un gas incoloro de olor acre asfixiante, soluble en agua, explosivo y tóxico. Es más liviano que el aire, por lo que se deben usar esa clase de escondites para protegerse.
Informa EFE.