Karen Musalo: ''La directiva del retorno va en contra de los derechos fundamentales''
La directora del Centro de Estudios sobre Género y Refugiados en California y una de las ponentes dentro de la semana temática Vidas en tránsito, el Día del Refugiado, que se celebra estos días en Casa África, Karen Musalo, aseguró este jueves que la directiva del retorno aprobada por el Parlamento Europeo, y que amplía el plazo de detención de los inmigrantes hasta 18 meses para casos excepcionales, “va en contra de los derechos humanos y supone un paso atrás”.
En una entrevista en El Correíllo de CANARIAS AHORA RADIO, la prestigiosa experta en derecho de asilo insistió en que no se puede considerar al inmigrante como a un delincuente ya que se estaría castigando a personas que son refugiados. “En lugar de protegerlos, los metemos en la cárcel”, indicó Musalo.
Karen Musalo insistió en la necesidad de que se derribe el mito de que los inmigrantes quieren dañar las oportunidades de los residentes sino que por el contrario son los que realizan los trabajos que la población local no quiere. “Habría que darles las gracias y no tratarlos como animales”, indicó la directora del Centro de Estudios sobre Género y Refugiados en California.
Musalo también se refirió durante la entrevista a su lucha por los derechos de las mujeres inmigrantes que, tal y como dijo la propia investigadora, “han tenido que llevar a cabo una doble lucha” para que se les reconozca ciertas violaciones de sus derechos fundamentales, como la violencia de género o la mutilación genital, como causas que justifican la concesión del derecho de asilo. “Muchas veces se ven estas violaciones como algo asociado a la cultura o la religión”.
En este sentido destaca el trabajo de Karen Musalo que ha contribuido a la evolución de la jurisprudencia del derecho de asilo, no sólo a través de sus investigaciones, sino a través del ejercicio de su profesión, la abogacía, llevando casos de referencia como el caso Kasinga en el que la Junta de Apelaciones de Inmigración de Estados Unidos decretó que se diera asilo político por temor a la mutilación genital femenina a Fauziya Kasinga, una mujer de Togo que con a penas 17 años estuvo encarcelada 16 meses en Estados Unidos.
