No vean el cabreo que tienen los sindicatos con la consejera de Presidencia y Justicia, nuestra muy admirada Australia Navarro, artífice de los casinos por órdenes de arriba. Ya saben que no va a acudir a la Comisión de Gobernación del Parlamento porque, lamentablemente -qué casualidad-, la ha citado el ministro del Interior a una reunión de la Comisión Nacional de Protección Civil. En un gesto de máxima transparencia -o provocación- su departamento ha enviado un comunicado a todos los funcionarios para que se enteren bien de los motivos de su deserción parlamentaria, quizá porque no podrá delegar en otra persona para la reunión de Madrid. Lo que desde luego es indelegable es su comparecencia parlamentaria. Y los pitos que se ha ahorrado, porque los funcionarios la iban a esperar en la puerta para una serenata. Boba no es.