Sin necesidad de alejarnos mucho del bollo del cogollo del meollo del gas, seguimos ofreciéndoles más detalles acerca de otra operación de calado y de mucha actualidad. Aunque la prensa especializada de la región siga sin querer enterarse (y cuando se entere no nos citará, ya verán), la venta del 51% de Anfi del Mar, S.L. es de enorme envergadura. Ayer les andicipábamos cómo se produjeron las primeras escaramuzas para que Santiago Santana Cazorla se enterara de las negociaciones de Eustasio López con Björn Lyng y tratara de hacerle la pirula negociando con la otra parte, con los alemanes de TUI. Y les dijimos que Santana Cazorla no se enteró por Lyng, ni por Eustasio, ni por el Lucerito del Alba. Se enteró porque conoce a un gran profesional muy metido en este mundo, Thomas Scharfemberg.