Con esto del endeudamiento municipal y la falta de tesorería con que José Manuel Soria obsequió a su querida y dilecta sucesora en el Ayuntamiento de Las Palmas, ha vuelto a tomar mucho relieve el complicado asunto de La Favorita. Esa operación, que costó al consistorio la nada despreciable cantidad de 12 millones de euros, endeudó a la institución por un ojo de la cara y la yema del otro. Tanto es así que los expertos calculan entre tres y cuatro puntos porcentuales el incremento del endeudamiento municipal. Pero para que aquella operación saliera resultona, como salió, hubo que hacer filigranas. En este punto circulan dos versiones, a saber: versión a) fue un traje a la medida, y versión b) el Ayuntamiento hizo el primo después de que algunos potenciales empresarios rechazaran el paquete por aquel importe tan sabroso.