El abogado que representa los intereses del tal Vargas es Juan Sánchez Limiñana, un letrado muy inspirado en cuyos escritos hemos leído siempre cosas verdaderamente grandiosas referidas a CANARIAS AHORA, periódico que debe ser para él una obsesión. Para él y para sus clientes, porque nos resulta ciertamente llamativo que el señor Sánchez Limiñana sea el defensor del inspector Vargas al mismo tiempo que lo es de una de las principales encartadas en la operación Góndola, ¿se acuerdan? aquel pequeño escándalo de corrupción por el que esa ex concejala del PP en Mogán fue detenida en compañía de otras muchas personas, entre otras, el alcalde del mismo partido y del mismo municipio, nuestro Paquirrín González. Y ustedes se preguntarán dónde está la desavenencia moral. Pues muy sencillo: el inspector Vargas fue denunciado por sus compañeros de la Brigada Provincial de Información por ser sospechoso de haber filtrado información de las investigaciones del caso Góndola a los malos de la película, es decir, a los imputados del Partido Popular. Porque ya que el PP habla de camarillas policiales, vamos a contarles las que nosotros conocemos.