Alex Txikon y su equipo se encuentran de vuelta en el campo base. La ventana de buen tiempo prevista entre los días 24 y 25 de febrero, y por la que lanzaban el intento, sufrió un brusco cambio, lo que complicaba muchísimo la situación y les obligaba, para estar fuera de peligro, a descender.
Según informaban desde el Everest, Alex Txikon y su equipo avanzaban del campo 3, a 7.100 metros, hacia campo 4, a 7.950 metros, cuando de un momento a otro se dieron cuenta de que la previsión meteorológica que se preveía, con vientos de hasta 50 km/h, cambiaba radicalmente a vientos de hasta 70 km/h en collado Sur y hasta de 100 km/h en cumbre.
“Debemos bajar ya si no queremos perder todos los dedos o que alguien se quede por el camino, está muy peligroso”, nos contaba el alpinista Alex Txikon preocupado por la situación de todo el equipo. Por suerte, todos los miembros pudieron descender sin problemas al campo base. Ahora toca tomar la decisión final con respecto a la expedición.