Camisetas contra la política inmigratoria de Arizona
Los Suns de Phoenix lucirán, este miércoles (madrugada del jueves en Canarias) y durante el segundo partido de la semifinal de la Conferencia Oeste que les enfrenta a los Spurs de San Antonio, una camiseta reivindicativa. La franquicia de Arizona utilizará la equipación de la noche latina (cita anual en la que varios conjuntos de la NBA añaden el artículo español 'los' a su camiseta) para protestar contra la nueva ley de inmigración del estado que ha aprobado la gobernadora republicana Jan Brewer.
La ley SB1070 de Arizona criminaliza la inmigración irregular. Tanto, que la nueva norma posibilita que los inmigrantes indocumentados puedan ser condenados a seis meses de cárcel, que transportar a un inmigrante sin papeles sea delito y que la población civil pueda instar a la policía a realizar controles en caso de sospechar que alguien no se encuentra de manera legal en el país.
La nueva ley ha propiciado protestas en todo el país, incluidas las del propio Barack Obama (presidente de Estados Unidos), quien considera que la norma aprobada en Arizona está “mal encaminada”. Y entre las críticas a la decisión adoptada por Jan Brewer destaca, por su repercusión y por lo poco habitual de estos actos en el deporte profesional, la reivindicación que realizarán los Suns de Phoenix.
“Nuestros jugadores y la organización hemos considerado que lo mejor para mostrarnos en contra de esta nueva ley es vestir nuestra camiseta latina para así honrar a esta comunidad y a la diversidad de nuestra liga, el estado de Arizona y nuestra nación”, señaló a Europa Press Robert Sarver, propietario de la franquicia de Arizona y reconocido republicano.
El gerente general del equipo Steve Kerr, aseguró que la decisión la han tomado “todos” los jugadores (entre los que militan un canadiense (Steve Nash), un brasileño (Leandrinho Barbosa) y un esloveno (Goran Dragic)) y que ninguno se ha mostrado “en contra”. De esta manera el equipo quiere mostrar su rechazo a una ley que, según los partidarios (una bueana parte del país), es necesaria para frenar la delincuencia en Arizona, donde viven cerca de 460.000 inmigrantes ilegales (la mayoría procedentes de México).
