España jugará en diciembre la séptima final de su historia ante la debutante República Checa
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El equipo español de Copa Davis logró este sábado el pase a su séptima final, que disputará ante la República Checa del 4 al 6 de diciembre y que será la quinta en los últimos nueve años, la segunda de forma consecutiva.
La 'Armada', a pesar de las bajas por lesión de sus dos mejores jugadores Rafa Nadal y Fernando Verdasco, prolongó su idilio con la Davis como demuestra su nueva presencia en la final de tan prestigiosa competición después de las de 2000, 2003, 2004 y 2007.
El equipo español disputó su primera final en 1965 con una severa derrota en Australia (4-1). Dos años después repetiría ante los 'aussies' con la misma suerte (4-1).
Desde entonces un largo periplo sin finales hasta la entrada en el nuevo siglo. Juan Carlos Ferrero y Albert Costa, con Alex Corretja y Joan Balcells en el dobles, hicieron historia en 2000 en Barcelona (ante Australia) y el éxito se reeditó cuatro años después en Sevilla con Nadal como héroe frente a Estados Unidos. Además, España encajó una inapelable derrota ante Australia en la hierba de Melbourne en 2003.
El año pasado, con la sensible baja del manacorí --entonces número uno del mundo--, Feliciano López y Fernando Verdasco consiguieron sorprender a Argentina en la pista rápida cubierta montada por los albicelestes en la ciudad balneario de Mar del Plata. Esa superficie terminó haciendo caer a los sudamericanos en su propia trampa.
Ahora, en el mes de diciembre su rival será la República Checa que destaca en la solidez de sus dos jugadores principales: Tomas Berdych y Radek Stepanek. Ambos acabaron este sábado con las esperanzas croatas en un partido de dobles en el que no estaba previsto que participaran, pero tras los resultados del viernes (0-2), apostaron por poner toda la carne en el asador para ganar el punto definitivo.
El último enfrentamiento de los españoles con la República Checa en la Davis se produjo en Ostrava en el año 2004. Aquella eliminatoria de primera ronda se resolvió en favor de los españoles por 3-2 y fue el punto de partida de una rivalidad que aún se prolonga entre Rafa Nadal y Tomas Berdych.
El checo se tomó su venganza personal con el manacorí cuando le venció en el Masters de Madrid en 2006 y se permitió el lujo de mandar a callar al público. Desde entonces, su relación se ha deteriorado hasta el punto de que ambos jugadores no se hablan.
La ventaja que España tendrá será el factor cancha favorable ante unos rivales que no rinden bien en tierra batida -ni Stepanek ni Berdych han pasado jamás de cuarta ronda de Roland Garros-, pero que no son de fiar tras vencer a Croacia en esa superficie en las semifinales.