En la dura tarea de cubrir todos los flancos (con ene intercalada), el periódico de Juan Francisco García puso en marcha para este domingo a lo mejor de su tropa, empezando por el director, que se cascó una vibrante entrevista con Carmelo Ramírez con el muy noble propósito de ponerlo nuevamente de rodillas en posición de pedir perdón por la querella que en 2000 presentó el consejo de administración de La Caja contra el editor del diario creativo. En otra entrevista dominical, el periódico coge por banda al magistrado Rafael Fernández Valverde para sacarle con forceps un pronunciamiento sobre la polémica de moda: la detención del empresario Santana Cazorla, y de paso, ¿cree usted que el nuevo presidente de La Caja está por encima del bien y del mal? La respuesta fue positiva, cómo no. Faltó preguntarle por su agria polémica con Iñaki Gabilondo o por el conflicto gasístico en la Federación Rusa. Todo se andará. Pero volvamos sobre la controversia de las detenciones de intocables, porque es en este asunto donde el cada vez más flaco periódico (nos referimos a la paginación) pone toda la carne en el asador, dicho sea de nuevo sin segundas lo de la carne, que estamos torpones hoy.