Juan Alberto Belloch es estos días el alcalde más ajetreado del verano. Anfitrión de la Exposición Internacional de Zaragoza, atiende a planeta y medio en la fiesta del agua a la vera de Ebro. La mañana de este miércoles recibió a José Miguel Pérez, presidente del Cabildo de Gran Canaria que celebra su semana en el Pabellón de Canarias, y por la noche asistió en el Auditorio maño a la interpretación del himno de Aragón por parte de la Filarmónica grancanaria, con partitura del maestro Valle. Belloch no tenía hueco para asistir a la recepción posterior del presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, que agasajó con una cena a la delegación grancanaria. Su agenda estaba a rebosar, nunca mejor dicho. Pero un invitado especial a esa cena y al auditorio provocó que Belloch diera instrucciones concretas a su gabinete para que le liberara de todo compromiso para no faltar a la cita: acudió el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Jerónimo Saavedra, y ante un ex compañero de Gobierno en los consejos de ministros de Felipe González, no había excusa alguna para no asistir. Todo un detalle. Como el de Pepe Segura, que no quiso perderse la semana grande de Gran Canaria.