Desde luego que la sanidad es una de las asignaturas pendientes del Gobierno, aunque en este caso volvamos a hablar de un centro dependiente del Cabildo de Tenerife: el hospital Febles Campos. Un grupo irreductible de familiares de enfermos internados ha alertado sobre el extremo calor en las habitaciones. A la falta de aire acondicionado se unen las estrecheces y las elevadas temperaturas de la semana pasada convirtieron el centro en un horror. Sólo que los que estaban al fuego eran los pacientes. Donde sí hay aire acondicionado es en los despachos, según denuncia la plataforma de familiares de enfermos del Febles Campos, que ya se sabe que los directivos tienen que estar a gustito y las personas discapacitadas y dependientes ingresadas en el hospital pueden sudar la gota gorda acostados en sus camas. Lo familiares recuerdan que tanto el presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, como la oposición socialista en la corporación, se comprometieron a reunirse con ellos y a tratar de resolver los problemas, que con un poco de voluntad que se ponga se acaban por la vía rápida. Aunque ya no estemos en campaña electoral.