No hubo que someter a Pepa Luzardo a un duro interrogatorio para que explicara cómo le llegó aquella grabación, efectuada a escondidas. Desde el minuto uno, en la primera pregunta, Luzardo soltó que la grabación se la entregó Carmen Nieves Fernández, secretaria del consejo de administración de La Caja de Canarias. Para mayor detalle y preguntada si conocía el segundo apellido de la camarógrafa, la ex alcaldesa dijo desconocerlo, pero aportó dos datos más para su plena identificación: vive en la calle Juan Rejón y trabaja en el Instituto Cruz de Piedra. Carmen Nieves Fernández Hernández, que así se llama la fuente delatada por Pepa Luzardo, será propuesta para ser llamada a declarar en calidad de imputada, después de que se supiera en esa declaración, por boca de su delatora, que intentó colocar sin éxito la grabación en los medios de comunicación. Ante ese fracaso, Luzardo explicó que se vio en la obligación, en cumplimiento de sus responsabilidades como líder de la oposición municipal, de convocar la rueda de prensa que ha dado lugar a la querella y su consiguiente imputación.