Se le soltó la pinza en varias ocasiones este martes al director de Barrilete Radio cuando se puso a hablar de “las posesiones” (sic) de Jaime Cortezo, particularmente la del Islote del Francés, la principal tabla de salvación para reflotar empresas e inversiones fallidas que tiene entre manos. La defendió con ahínco, mordió canillas, mentó a tirios y troyanos, a gerentes, contables, ingenieros, periodistas, políticos y otras gentes malvadas que tratan de estropear el negocio al jefe. Lejos queda aquel cariñoso talante con el que trató en su programa al profesor Francisco Jiménez de Cisneros, al que llevó no para hablar de puertos o de ingenierías, sino para hacerle la más vulgar de las pelotas por su calidad de esposo de la actual directora general de la Sostenibilidad de las Costas y del Mar, Alicia Paz, con la que quieren llevarse bien para mejor proveer. Es la única socialista que ha salido indemne de momento.