Vamos conociendo más detalles de las maneras que se han instalado en Infecar por parte de los cachorros sorianos, que en ocasiones superan al maestro en faltarle el respeto a la gente. Testigos presenciales ya han contado cómo fueron los despidos del pasado viernes: “fue humillante”, dicen, “pues hay maneras y maneras de hacer las cosas pudiéndose evitar en lo posible malos tragos para los compañeros. Los fueron llamando de uno en uno al despacho del director general, a donde iban acompañados cada uno de su jefe de departamento, que se quedaba en la puerta por si había negativa de firmar la carta de despido para servir de testigos. Las formas de comunicar el despido del nuevo director general, Sebastián Sansó, a sus trabajadores fueron incluso despreciativas en muchos casos”.