Está siendo ésta una semana ciertamente llamativa para dos personas de las consideradas de mucho prestigio. Además de Suárez del Toro, ahora en manos de un apaño entre NC y el PP, con el extrarradio ejerciendo de padrino, Eligio Hernández también ha puesto en juego su prestigio en favor de dos personajes de cuyas respectivas imputaciones penales aún es precipitado pronunciarse. Nos referimos a las situaciones judiciales de ambos, porque políticamente está claro que los dos personajes debían haber dimitido hace semanas, desde que se descubrieron sus venturas y desventuras alrededor de Anfi del Mar. El ex magistrado herreño, además de defender a su amigo y asegurar que Soria no ha delinquido en este asunto (ya sabe más que la magistrada instructora) asegura que éste es “el escándalo de los escandalosos”. No sabemos si con el término “escandaloso” se refiere al director de este periódico, el denunciante, o a la Fiscalía Anticorrupción, que la ha asumido y ha ampliado; o si se refiere a la juez, que investiga muchas cosas en estos momentos. O si se refiere a sus compañeros del PSOE, o a Justicia y Sociedad. Ya lo explicará.