Los medios afines a Dimas Martín y desafectos al PSOE se han lanzado inmediatamente a dar por buenas las versiones del líder del PIL sobre sus reuniones con líderes socialistas locales. Reuniones por otra parte ciertas, todas ellas anteriores al estallido del escándalo y con el capo di capi con permisos carcelarios. En su empeño por meter al PSOE en una corrupción imposible (el denunciante y víctima no puede también repicar y dar la misa) medios como Lancelot se han permitido incluso hacer un burdo fotomontaje en el que se ve a Dimas en compañía de Manuela Armas y Carlos Espino paseando por Los Jameos. Es tan tosco el engaño que se les olvidó ponerle una sombra a la insigne figura de Dimas Martín, sombra alargada como la de un ciprés, como es conocido por todos. Les faltó resaltar la frase más memorable de la carta de Dimas desde la prisión de Tenerife II, justificando los documentos oficiales que aparecieron en la cárcel: Son “para trabajar en lo que más me gusta: ¡aportar ideas para mejorar nuestra isla!” Anda, exactamente lo mismo que dice el sumario de Unión.