La situación de Carmen Nieves Fernández se complicaba por momentos durante su declaración ante el juez Passaro el pasado 30 de abril porque su versión sobre los hechos se tornaba cada vez más increíble. El interrogatorio al que la sometió la abogada de Sansó fue implacable, hasta el punto de llevarla a reconocer que en al menos una ocasión Pepa Luzardo fue a recogerla a su domicilio de la calle Juan Rejón para ir juntitas al despacho del abogado que defiende a la ex alcaldesa, el ex magistrado José Mateo Díaz. ¿A qué va una testigo en compañía de una imputada al despacho del abogado de ésta en las fechas previas a su declaración ante el juez? Mal asunto. Es el propio Mateo quien termina protestando ante el enfoque de las preguntas de la letrada de la acusación, momento en que ésta pide al juez que suspenda el acto de interrogatorio para poder llamar a la testigo como imputada. La abogada ya ha presentado un escrito para que se impute a las dos Cármenes, que la Hidalgo todavía no ha depuesto.