Los diversos frentes abiertos en el incendio de Tenerife ha originado no pocas situaciones de terror. El alcalde de Buenavista, Aurelio Abreu, pudo ser escuchado este martes pidiendo ayuda a través de las emisoras de radio porque nadie contestaba a sus llamadas en los centros de emergencia. Por la noche, a eso de las nueve y media, una asamblea de vecinos en el pago de Arjos, en Los Silos, discutía qué hacer ante la impotencia de no haber visto en todo el día ni un bombero, ni un político, ni un helicóptero. El alcalde, Santiago Martín, con sus propios medios y voluntarios, organizaban su propia evacuación, que habrían de realizar a través de la zona quemada en Santiago del Teide.