Lamentablemente, Luis Villegas ya no está para poder corrobar, matizar o profundizar en el contenido de su informe de noviembre de 2008, en el que llegó afirmar a todos los compromisarios del Congreso Insular que “durante los cuatro años que llevo en esta responsabilidad, la actual presidenta no ha dado ningún tipo de facilidades para supervisar los libros de contabilidad del partido. Es imposible saber cuáles han sido los ingresos y cuáles los gastos, con qué criterios se han distribuido y en base a qué argumentos se han tomado estas decisiones”, pero de algo podrá servir a la Fiscalía Anticorrupción de Santa Cruz de Tenerife tremendas valoraciones de menos de dos años, en su trabajo de sopesar si la denuncia presentada por el colectivo de juristas Justicia y Sociedad tiene recorrido. Lo que hubo, en todo caso, fue una caza de brujas por parte del grupo dirigente de Cristina Tavío contra su autor, exonerado en última instancia por el PP Nacional, sin que entrara Génova a valorar el contenido de la denuncia del ex tesorero.