Les contamos aquí no hace mucho la suerte que acompaña siempre al Partido Popular en el asilo de ancianos de Tafira Baja, en Las Palmas, donde siempre gana casi con el cien por cien de los votos todas las elecciones. O sin el casi. Tan escandalosos eran los resultados, que se abrió una investigación y se determinó que lo mejor, para evitar la tentación y el pecado a las monjitas, era suprimir la mesa electoral allí autorizada por la Junta Electoral Provincial. Dicho y hecho. Pero sor Carmen, la superiora de la orden que vela por la salvación de esos viejitos, sabe suplir la necesidad por virtud, y en un alarde de habilidad democrática, ha solicitado la documentación y las papeletas para el voto por correo de sus feligreses. Ya ha pedido los 279 documentos en un impecable expediente que conducirá a 279 votos para el Partido Popular. Nos falta por saber si sor Carmen cuenta con la bendición de monseñor Ramón Echarren o si actúa por su cuenta para ganarse un sitio en el cielo.