La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, cuyo departamento envió desde la Península, haciendo sucesivas escalas en Marruecos, dos helicópteros, permaneció siempre al corriente de la marcha de las operaciones de extinción. Le informaba de las mismas José Miguel Pérez, el presidente del Cabildo, que desde el primer momento se puso al frente de los operativos, tanto en la cumbre como en el centro de coordinación, situado en Tafira. Pérez resaltó en varias ocasiones el papel desempeñado por el Estado y cómo éste ha multiplicado por cinco sus inversiones en lucha contra el fuego en Canarias desde que está ZP en La Moncloa. Entre los aparatos del Estado, del Cabildo y de la Comunidad Autónoma, llegaron a sumarse once aeronaves arrojando agua dulce sobre las llamas.