Efectivamente, el niño puede llevar siete meses sin aparecer por el colegio, justo el tiempo que hace que su padre, un policía local, Rafael Jesús Cabrera Díaz, se presentó en el pequeño centro de Tinoca y se dirigió al aula donde se encontraba la profesora de su hijo. Allí se encontró con la educadora y, en tono claramente amenazante, le dijo: “¿Quién te crees que eres tú? No te vas a escapar, te voy a pegar un tiro”. Así lo recoge como hecho probado una sentencia de 16 de abril pasado del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Arucas, que condena a esta joya de las fuerzas del orden por ser “autor criminalmente responsable de un delito de amenazas” a quince días de multa a razón de diez euros diarios y a alejarse 200 metros como mínimo del domicilio y lugar de trabajo de la profesora amenazada durante tres meses. Es decir, que aunque quisiera, el padre de Alejandro no puede acudir al centro que corresponde a su hijo. La Consejería de Educación se ha dirigido en dos ocasiones al Ayuntamiento de Guía para informarle de estos hechos, pero por el momento no ha habido contestación.