Las empresas públicas son un buen instrumento para aplicar el tijeretazo porque, además del ahorro, podría hacer cundir la suerte de que se acabaron los enchufes y el pesebrismo. Lo lamentamos por algunos que acaban de llegar por esa vía, como el letrado que ha contratado Proexca, de nombre Javier Checa, al que el puesto debe venir un poco grande. El hombre mantiene a varias asesorías externas, entre otras a la de Marcos Hermoso Varela, hijo de Manuel Hermoso Rojas, ex presidente del Gobierno, y socio a su vez de aquella famosa promotora que promete forrarse con el solar de Celgán y el nuevo y generoso Plan General de Santa Cruz. Hermoso Varela es socio y administrador mancomunado de Eastman Asesores, S.L., que debe ser la que pasa sus saladitas facturas a Proexca. Los pagos en la empresa pública quedan siempre en buenas manos porque, entre otras firmas, en los mandamientos aparece la de su cuñada Carolina Palmer junto a la del consejero delegado, Javier Mariscal. Venga, Manolo, a recortar.