Los tres directivos de El Mundo TV desplazados a Canarias para hacerse cargo de los primeros encargos a dedo de la Televisión Canaria ya han empezado a flipar en colores. Ya les sorprendió cuando les dijeron que había que venirse para acá deprisa y corriendo, sin crear una estructura mínima de empresa, sin saber qué se iban a encontrar, pero así son los regalos políticos de este Gobierno que padecemos. Cuando aterrizaron les dijeron que todo valía, que tenían barra libre y que empezaran por hacer un programa con formato parecido al Moros y Cristianos que popularizó Javier Sardá y luego Jordi González. Pero acaban de tropezarse con las primeras imposiciones del ente, y ya tuvieron el primer mosqueo.