Merecidísima y oportunísima la entrevista que publicaba este domingo Canarias7 al alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, al cumplirse la muy emblemática y cabalística cifra de 132 días en el cargo. Bueno, al cumplirse la segunda tanda de detenciones de concejales del grupo de gobierno que le hizo alcalde hace esa cantidad de días. “No tengo motivos para llegar a desconfiar del PIL”, alega el regidor con esa solemne pose falaz a la que tanto se abrazan los integrantes de su partido cuando se le preguntan inconveniencias. Falsa también es su afirmación de que en esta tanda de detenciones han caído siete personas del PSOE, porque han sido tres, y ninguna de ellas con cargo público u orgánico, frente a siete del PIL con mando en plaza. Pero donde Reguera alcanza lo antológico es cuando se refiere al pelotazo del islote del Francés, al que empieza a llamar “La Rocar”, en una muy hábil operación de marketing para mejor proveer en el futuro. “Sólo dejaremos construir en vertical y con el aval de un arquitecto internacional (...) sin que le cueste nada al Ayuntamiento”. ¿Nada? ¿Le parece poco ese “icono en vertical”? Y concluye: “No hay pelotazo porque hemos puesto las cartas boca arriba”. Lo veremos pronto.