Se dio por aludido este jueves el director de la revista Tara, de Telde, por nuestros comentarios acerca de un complot mediático-cacharrero de varios medios conchabados con Guillermo Reyes para echar basura a granel sobre el actual grupo de gobierno de la ciudad de los Faycanes, con perdón. Dice Sebastián López Castro, que así se llama este entrañable colega, que él prefiere no darse por aludido y que, en todo caso, él es la víctima de una represalia por parte del Ayuntamiento por el simple hecho de discrepar. Según cuenta, fue despedido el pasado día 9 por el empresario Ramón Solé Vilanova, propietario de la empresa CGI, ganadora del concurso de gestión de la recaudación municipal teldense, que se subrogó el personal adscrito a ese departamento, mayormente proveniente de la muy polémica sociedad pública Urvitel. Dice López Castro que Solé le dio un ultimátum: o dejas la revista o eres despedido. Ha presentado demanda laboral por despido nulo.