Valentín Solano se convirtió este viernes en el nuevo jefe superior de Policía de Canarias, en sustitución de Julián Márquez, cuyo destino aún es desconocido. Solano abandona ahora la jefatura provincial de Teruel, la capital de provincia más segura de España, con una tasa de criminalidad por debajo de la mitad de la media española (24,4 infracciones por cada 1.000 habitantes). El nuevo jefe superior de Policía, de 54 años, es aragonés y militar de carrera del arma de Infantería. Se convirtió en comisario en la segunda promoción, al igual que en la segunda promoción (2006) se convirtió en comisario principal. Casualmente comparte esa trayectoria profesional, al igual que la pertenencia al Sindicato Unificado de la Policía (SUP), prácticamente al milímetro con el comisario principal que le va a sustituir en Teruel, Narciso Ortega, quien fuera jefe superior de Canarias desde 2004 hasta 2008 y que ahora acaba de ser relevado de la jefatura superior de Cataluña. Solano es un viejo conocido del Director Adjunto Operativo, el número dos de la Policía, Eugenio Pino, con el que coincidió en Teruel mientras el DAO era comisario en Huesca. El nombramiento de Valentín Solano confirma la determinación del Gobierno de designar para las jefaturas superiores pluriprovinciales a comisarios principales, lo que ha frustrado la firme candidatura de Ignacio Badenas, propuesto por el PP de Canarias para ese puesto.