En esa huida hacia adelante, Soria cuenta con el calorcito del periódico Canarias7, que ha iniciado estos días una muy particular cruzada contra el Cuerpo Superior de Policía en dos frentes. De un lado, achacando a esa institución ser la única interesada en investigar a Soria, y de otro, culpándola de los males que sufrió el empresario Santiago Santana Cazorla durante la tramitación una pieza separada (una) del caso Góndola. Y decimos una pieza separada porque, se pongan como se pongan los escribidores de la causa, el empresario continúa imputado en el cuerpo principal del sumario gondolero. Pero, volviendo a Soria, el vicepresidente y sus escribidores pretenden hacer creer al público que lo que ha pedido la juez Margarita Varona a la Policía no es que se investiguen sus cuentas y las declaraciones de Hacienda suyas y de su señora de él, sino simplemente unos cuantos documentos bancarios para empapelar su despacho del Palacio de Justicia.